“Una de las razones por las que opté por BEA fue porque desde un principio se mostraron muy dispuestos a trabajar conmigo en superar mi nivel, siempre hubo un seguimiento a la evolución de mis habilidades. Uno generalmente piensa que un instituto vende programas “cerrados” pero en BEA me di cuenta de que el alumno es lo importante y el trabajo, el material, las clases están alineadas y diseñadas para las necesidades concretas del estudiante. Otro factor relevante es la relación profesor-alumno; en BEA hay una preocupación por encontrar al profesor más idóneo para cada alumno lo cual permite que las clases sea más fluidas y personalizadas.”